La pasta ha sido uno de los alimentos favoritos de muchísimas familias durante siglos. Tanto tiempo, que muchas personas a menudo se preguntan cuál es exactamente el origen de la pasta. ¿Qué civilización fue la primera en disfrutar de esta comida tan completa, deliciosa y versátil? La pasta ha sido consumida por muchas culturas diferentes a lo largo de la historia. Hoy, es uno de los alimentos más empleados en los cinco continentes. ¡No hay duda de que la pasta ha sabido resistir perfectamente el paso de los años

Los orígenes de la pasta: un alimento milenario

Aunque la leyenda popular afirma que fue Marco Polo quien introdujo la pasta en Italia después de su exploración del Lejano Oriente a finales del siglo XIII, en realidad, la pasta se remonta al siglo IV a.C. Esto se sabe porque, en una tumba etrusca, se descubrió un grabado en el que se mostraba a un grupo de nativos haciendo lo que parecía ser pasta. Pero también sabemos que los chinos preparaban una comida parecida a lo que hoy conocemos como fideos, nada más y nada menos que ¡desde el año 3000 a. C!

La pasta en la mitología griega

La mitología griega también sugiere que el dios Vulcano inventó un dispositivo que hacía hilos de masa: hablamos, probablemente, de los primeros espaguetis.

El Nuevo Mundo

La pasta llegó al Nuevo Mundo a través de los ingleses, quienes la descubrieron durante una gira por Italia. Los colonos ingleses llevaron a Estados Unidos la práctica inglesa de cocinar fideos al menos media hora y luego sofreírlos con salsa de crema y queso: (los famosos mac & cheese).

Thomas Jefferson y su “máquina” de hacer macarrones

A Thomas Jefferson, el tercer presidente de los Estados Unidos de América, se le atribuye el hecho de haber traído la primera máquina de macarrones a Estados Unidos en el año 1789, tras su regreso a casa después de servir como embajador en Francia.

Producción industrial de la pasta

La primera fábrica de pasta industrial en Estados Unidos fue construida en Brooklyn en 1848 por un francés que extendía sus espaguetis en el techo para que se secasen al sol. La producción se expandió en el siglo XIX y aparecieron fabricantes de pasta en todo el país.

La pasta en España

José Espona (el fundador de Pastas Gallo) construyó la primera semolería de España en 1956 y, en 1958, cuando apenas existía mercado para la pasta en España, compró un antiguo molino en El Carpio y lo convirtió en fábrica de pastas. Poco más de una década después, ya era posible encontrar Pastas Gallo en más de 100.000 puntos de venta en toda España. Descubre la historia completa José Espona y Pastas Gallo aquí.

La pasta hoy en día

En la actualidad, la pasta sigue siendo un alimento indispensable para familias de todo el mundo y se produce en innumerables formas y tamaños, con diferentes bases de cereales, vegetales e incluso, versiones sin gluten disponibles.

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